Los 5 SacrificiosEn el comienzo del libro de Levítico somos introducidos a los sacrificios y sus funciones. Una lectura más detenida nos permite entender el juicio de Dios y lo que necesita para perdonar los pecados del hombre.
Nivel de Estudio: Avanzado (se requiere un gran conocimiento del texto bíblico y de comentarios bíblicos relacionados) IntroducciónParashá Vayikra [Lev 1:1-5:26] comienza detallando los cinco principales sacrificios permitidos en la Torah. Estos son:
Estos cinco sacrificios [Holocausto, Ofrenda de Grano, Sacrificio de Paz, Expiación por el Yerro y Sacrificio por la Culpa], por lo tanto, componen los cinco principales sacrificios de la Torah. Aparte de estos se puede agregar el korban Pesaj [cordero pascual] o la vaquilla roja, pero aquellos cumplen un propósito único a diferencia de que estos cinco establecen las normas de qué se puede sacrificar y cómo se debían hacer los sacrificios del Templo. De estos cinco sacrificios nos queremos detener en el primer sacrificio [Holocausto] y en los dos últimos [Jatat y Asham]. ¿Existe entre ellos alguna expiación por los pecados voluntarios? ¿Por qué los sacrificios Jatat y asham son obligatorios y el de Holocausto que aparentemente igual es para expiación es voluntario? Analizaremos estas preguntas pero previamente debemos establecer un principio fundamental de los sacrificios. "Dios no los necesita ni los requiere". Los profetas de Israel continuamente lo enseñaron pero los israelitas no lo entendieron, ¿Cómo es esto posible, hay secciones enteras como esta que hablan de sacrificios? La palabra hebrea korban que la Biblia traduce como "sacrificio" en realidad significa acercarse más, o acercamiento, aspirar a; esto indica que los korbanot [plural de sacrificios] son para acercarse más a Dios y no es realmente una ofrenda o algo relacionado al culto. Si bien, esto parece lejano a nuestro entendimiento contemporáneo, antiguamente ésta era la forma de mostrar sumisión y acercarse a los dioses, desprendiéndose de algo material o apreciado para satisfacer el hambre de los dioses. Los sacrificios han sido bastante cuestionados a lo largo de los años, algunos sugieren que era algo momentáneo, mientras otros apoyan la idea de son un ideal que Dios requiere, la verdad es que es algo complejo ya que en la era mesiánica estas prácticas serán retomadas, pero en realidad es que como sea, Dios es claro en que no los necesita y la única razón de por qué están en la Biblia es porque la humanidad aparentemente sí los necesita. Los sacrificios no son solo animales degollados, esto se puede entender como plegarias, oración, canticos, danzas o cualquier tipo de culto ofrendado a Dios que espera complacer una supuesta necesidad de parte de Dios de ser adorado, la verdad es que Dios no necesita nada de aquello. [1 Samuel 15:2 ; Isaías 1:11 ; Oséas 6:6 ; Miqueas 6:7 ; Amos 5:23] Sacrificio Jatat
El sacrificio de Jatat es bastante claro en el capítulo 4. Ya sea un individuo, toda la congregación, los sacerdotes o líderes de Israel que transgredieran los mandamientos de Dios sin consentimiento, por ignorancia o sin saberlo, cuando supieran que lo que hicieron estaba mal, entonces debían llevar este sacrificio al Templo.
El sacrificio Asham por otra parte es un poco más difícil de comprender en el capítulo 5: Sacrificio Asham
Lo complejo de esta lectura es, ¿Por qué una persona que fue llamada a testificar sería culpable del pecado? o ¿Por que una persona que toca algo inmundo se convierte en pecadora? por ejemplo, si la mascota de una persona muere y debe ser enterrada, ¿me hace transgresor de la Torah por sepultarlo?o ¿Cómo puede alguien jurar a la ligera y darse por entendido después de lo que había hecho?
Analicemos los siguientes versículos [Lev 5:21 en Hebreo y 6:1 RV1960]
Cualquiera de estos delitos parece ser lo suficientemente grave como para ser erradicado del Pueblo de Israel. Sin embargo, el caso continúa con una segunda infracción e implica que solo entonces la persona debe ofrendar un sacrificio por la culpa [asham].
Jurando falsamente
Parece extraño que a pesar de que todas las ofensas anteriores parecen bastante graves, solo por el hecho de jurar después falsamente o negando haber cometido tales infracciones la persona es culpable, ¿Por qué? ¿Puedo robar o hacer todas las acciones anteriormente citadas y solo se vuelven pecado si niego haberlas cometido?
Para evitar este problema, Abraham ibn Ezra (1089-1167) sugiere que el juramento falso es solo otro ejemplo de un pecado por el cual el asham será necesario:
Con esto Abraham Ibn Ezra, un gran comentarista, agrega el jurar en falso a un solo pecado más del gran listado y no al punto de enfoque de toda esta lectura. Sin embargo, esta es una traducción poco probable considerando que la frase sobre el juramento falso no se presenta de la misma manera que la lista larga en los vv. 21-22a, pero en cambio, parece reflejar las ofensas anteriores. Por lo tanto, el juramento falso aquí es una segunda infracción además de cualquier pecado que haya cometido el perpetrador.
Leamos los siguientes versículos para comprender de que trata un pecado y sacrificio Asham:
Aquí la historia se vuelve mucho más compleja ¿Por qué alguien que tuvo el descaro de jurar falsamente por el nombre de Yehovah en primer lugar cambiaría de rumbo y admitiría lo que había hecho? La respuesta depende de cómo traducimos וְאָשֵׁם ( ve - ashem ) —representado anteriormente como “es culpable” - en este contexto.
Consecuencias del Juramento falsoEl tercer mandamiento de "Los 10 Mandamientos" en Éxodo 20:3 dice:
"No usarás el nombre de Yehovah tu Dios en vano, porque Dios no tomará por inocente [no dejará impune] al que tome su nombre en vano." Este mandamiento se entiende claramente como el juramento falso en el nombre de Dios, y lo significante de este mandamiento es que éste es el único mandamiento en la Biblia donde expresamente dice, que Dios no tomará por inocente al que tome Su Nombre en vano. Ahora, ¿cómo es que esto se reflejaría ya que solo el que cometió el pecado es consciente de su pecado? Los comentaristas bíblicos sugieren que el ofensor se dio cuenta de su pecado [ve asham] por un sufrimiento físico o una perdida económica entendiéndose así como "un castigo divino" Esto se puede reflejar bien en la maldición de la mujer sospechosa de adulterio en la Torah:
Esta maldición, como se puede ver en el pasaje completo, se trata de una mujer sospechosa de adulterio, pero que en realidad no hay pruebas que comprueben su culpabilidad, por consiguiente es llevada a la entrada del Tabernáculo y debe jurar su inocencia a través de estas palabras, si su juramento es verdadero será llamada inmaculada o mujer santa, mientas si en realidad ocultaba el adulterio sufriría una maldición [no recibirá el castigo de los adúlteros porque no hay testigos, solo por más de dos testigos hay penalidad de muerte]. En conclusión, se puede aprender que cuando alguien juraba falsamente en el nombre de Dios, un efecto físico se encargaba de traer una especie de castigo. Esto no era algo inusual pues en el antiguo Medio Oriente, los votos y juramentos eran sagrados y el incumplimiento de ellos traía un efecto de culpa y una consecuencia casi inmediata. Esto se puede reflejar en varios textos bíblicos como Salmos 137:5, Job 31:20 y Rut 1:7.
La cuestión era que la violación de los juramentos no era solo una causa para sentirse culpable (ve- ashem) sino que por defecto traía una especie de castigo divino. Por lo tanto, volviendo a la complejidad del que juro falsamente o negó haber robado o no juró en el tribunal ¿Cómo es que esta persona se dio cuenta de su pecado y se convirtió "culpable" [asham]? La respuesta está en la consecuencia del juramento; Esto es, porque la persona juró no haber hecho "x" acción pero cuando a los días le vino "una enfermedad" o sufrió una perdida económica o de cualquier clase, la persona sintió la culpa y comenzó a reflexionar sobre sus hechos, por el cual concluyó que sí había sido culpable. Veamos los ejemplos citados en la Biblia :
En conclusión, el que cometió toda clase de pecados en los ejemplos de Levítico 5 y 6 solo pudo darse cuenta por el juramento falso que hizo en el nombre de Dios, dado que el que jura falsamente por el nombre de Dios no es considerado inocente [aunque lo sea] sufre un castigo divino y por consiguiente su pecado sale a la luz. A razón de esto se puede entender que el sacrificio Asham [por la culpa] también es una clase de pecados no intencionales, no con alevosía o a sabiendas al igual que los pecados Jatat. La prueba final de todo esto es el versículo siguiente:
El pago de la multa de un robo o daño aquí es significativamente menor que la multa comparable de pagar el doble que encontramos en los casos de robo descritos en Parashá Mishpatim (Éxodo 22: 6–8).
La razón de esto es porque el ladrón de Éxodo 22 robó algo intencionalmente, por consiguiente, debe restituir lo que tomó y pagar el doble como multa del delito, mientras en Levítico 5 el que robó, tomo algo de su prójimo sin saber o darse cuenta y al darse por entendido, obviamente debe devolverlo a su prójimo y agregar 1/5 parte como una mínima indemnización por la perdida que le tuvo que haber significado al dueño. Reflexión de los sacrificiosSi bien, el libro de Levítico puede parecer bastante complejo y por lo mismo es una recurso abierto para interpretes de todo tipo, por sobre todo estas instrucciones eran mandamientos concretos que la Nación de Israel debía cumplir como Constitución, y por consiguiente, estas instrucciones deben ser comprendidas tanto por los líderes como por los civiles como instrucciones concretas y no con significados místicos o rebuscados. Por otro lado, esta Constitución, entendiéndose como todo el libro de la Torah o Pentateuco era y es un libro espiritual que manifiesta la voluntad de Dios para el hombre y a su vez nos enseña cómo actúa Dios, qué piensa Dios, cómo juzga, qué desea de nosotros, etc.
A razón de todo esto, queremos transmitir la importancia de entender las instrucciones levíticas en su contexto escrito, lingüístico e histórico como siempre intentamos compartir, ya que son instrucciones aplicables, probablemente no hoy en día ya que los sacrificios están detenidos por la ausencia del Templo y sacerdotes consagrados, pero sí serán puestos en práctica con la llegada del Mesías de acuerdo a Ezequiel capítulo 40 en adelante. Además, al ver cómo Dios juzga y el contenido de estos cinco principales sacrificios aprendemos que:
Habiendo dicho lo último, entonces ¿Qué sucede cuando una persona peca con alevosías? ¿Puede ser perdonada por Dios? ¿Necesita sangres y sacrificios? El Holocausto¿Por qué una persona cuerda, llevaría lo mejor de sus animales ante los sacerdotes para que quemen su animal por completo, si no es un sacrificio obligatorio (es voluntario) y Dios no se complace en sacrificios? Una posible explicación del versículo 4 y la controversia de los sacrificios de los israelitas: Lev 1:4 Y pondrá su mano sobre la cabeza del holocausto, y será aceptado para expiación suya. Como hemos señalado Levíticos capítulo 1 enseña que este sacrificio es voluntario, Dios no lo pide. Pero aparentemente una persona lo llevaba y le servía para expiación. la pregunta es ¿Expiación de qué? si el capítulo 4, 5 y 6 habla al respecto y no tienen nada que ver con este sacrificio. Tradicionalmente los judíos entienden que se trata de los pecados voluntarios y esto se refleja en el significado de poner las manos sobre la cabeza del animal en Lev 16:1 y números 15. En ambos pasajes se define que esta acción de poner la mano sobre la cabeza del animal conllevaba una acción que cambiaba la posición del transgresor radicalmente. "Confesar los pecados". En otras palabras, cuando la persona llevaba su holocausto al Templo y ponía su mano sobre la cabeza del animal y confesaba ante Dios sus pecados, la persona estaba declarando la conversión que los profetas de Israel continuamente enseñaron: "Si te convirtieres de tus malos caminos y guardares los mandamientos de Yehovah tu Dios y confesares tus pecados". En este caso, el dador estaba en la última etapa de este arrepentimiento, lo que significa es que si pecó voluntariamente, algo que no se puede hacer y no hay sacrificios que expíen esa clase de pecados, el que llevaba el sacrificio tuvo que haberse arrepentido previamente, haber restituido o corregido sus malas acciones y ya había sido perdonado, por eso aquí solo voluntariamente [ya que Dios no exige esto] el pecador quiere acercarse a Dios y lleva esta ofrenda que como mérito Dios le permite saber que sus pecados son perdonados. Esto se puede entender mejor con el Salmo 51 16 Porque no quieres sacrificio, que yo lo daría; No quieres holocausto. 17 Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios. 18 Haz bien con tu benevolencia a Sion; Edifica los muros de Jerusalén. 19 Entonces te agradarán los sacrificios de justicia, El holocausto u ofrenda del todo quemada; Entonces ofrecerán becerros sobre tu altar. Yehováh Dios solo espera un arrepentimiento genuino del corazón y no sacrificios, solo después de que hay un verdadero arrepentimiento [sacrificio de justicia] el pueblo de acuerdo a la Torah debía ofrecer los sacrificios respectivos, pero el salmista sigue ocultando el interés de Dios por ellos, queriendo decir que aquello solo es un trámite posterior al arrepentimiento, lo que Dios espera y es el clímax de la alabanza, es un espíritu humillado delante de Dios. |